Entradas

Mostrando entradas de agosto, 2024

Dom. XXII del T.O. Yendo al corazón de la fe

Imagen
Después de llevarnos durante algunas semanas a meditar un discurso complejo, en el que Jesús se identifica con el pan de vida, en el capítulo 6 del evangelio de Juan, la liturgia nos devuelve al Evangelio de Marcos, compañero de viaje de este año.   La Palabra proclamada ofrece un discurso importante que nos plantea un examen de conciencia bastante exigente: ¿cómo anda la autenticidad de mi fe?   La ocasión, es el diálogo que se produce entre Jesús, los fariseos y los escribas, quienes se jactan de observar escrupulosamente la Ley, aunque no la vivan con el alma. Están tan preocupados por cumplir con las reglas y por respetarlas que ha perdido de vista el centro de ellas.   Nosotros tampoco estamos lejos de esta visión legalista de la relación con Dios. Muchas veces pensamos que estamos llamados a hacer cosas para el Señor, sin favorecer una verdadera relación con Él. Nuestros encuentros se convierten en un resumen de oraciones que se repiten con muchas palabras, pero con...

Podcast. Dom XXI del T.O. "¡Esta palabra es dura!" ... ¿o es duro nuestro corazón?

Imagen
  La dureza es característica de quien no tiene fe, de quien no cree; son aquellos que necesitan convertir su corazón de piedra en un corazón de carne. Este es el caso del evangelio: la Palabra de vida que Jesús da a sus discípulos es "inescuchable" para los judíos “hombres de dura cerviz”. No resuena en los oídos de estos hombres el discurso de Jesús. Pero para que esta cuestión la comprendamos mejor, es necesario volver a la exclamación inicial: "¡esta palabra es dura!". ¿Por qué? ¿Qué hace que la Palabra de salvación sea “dura”? Es difícil porque no es una palabra que pueda simplemente ser escuchada y luego continuar viviendo el encuentro con Dios como espectadores. Los judíos se sienten estremecidos por el discurso del pan que desciende del cielo para ser comido y que Jesús identifica con su propia carne, del que hay que comer para entrar en la vida divina. Esto significaba para los ellos un cambio radical: ya no basta con una vida aparentemente fiel marcada por...

REVISTA LUGAR Nº 9

Imagen
https://drive.google.com/file/d/1f8koxVjsQkRq8MaowncCgcBz4lUtV5pO/view?usp=sharing  

Podcast. Dom. XX del T.O. "El pan que yo daré es mi carne para la vida del mundo"

Imagen
  Del pasaje evangélico tomo esta expresión: "El pan que daré es mi carne para la vida del mundo" (Jn 6,51). Esta frase muestra esa compasión íntima que Dios tiene por cada persona. Lo que se nos presenta, es ese sentimiento profundamente humano con la intención salvadora de Dios para cada hombre, para que pueda alcanzar la vida verdadera. Por eso en la Eucaristía Jesús nos hace testigos de la compasión de Dios por cada hermano y hermana. El servicio de caridad hacia los demás desciende del misterio eucarístico; por él llego a amar, en Dios y con Dios, incluso a la persona que no me agrada, o que ni siquiera conozco, porque en la comunión favorezco ese encuentro íntimo con el Señor que me permite unirme a Él, y de esta manera estoy invitado a mirar al otro ya no sólo con mis ojos y mis sentimientos, sino desde la perspectiva de Jesucristo. Por este motivo, cuando las comunidades cristianas celebran la Eucaristía, deben tomar cada vez más conciencia de que el sacrificio de Cri...

HOMILIA EN LA SOLEMNIDAD DE LA ASUNCIÓN. María es la estrella que guía nuestros pasos

Imagen
En pleno mes de agosto la Iglesia en Oriente y Occidente celebra la Solemnidad de la Asunción de María Santísima al Cielo. En la Iglesia católica, el dogma de la Asunción fue proclamado durante el Año Santo de 1950 por el papa Pío XII. La celebración, sin embargo, de este misterio de María tiene sus raíces en la fe y el culto de los primeros siglos de la Iglesia, por esa profunda devoción hacia la Madre de Dios que se ha desarrollado progresivamente en la comunidad cristiana. Para comprender la Asunción debemos mirar la Pascua. María, que engendró al Hijo de Dios en la carne, es la criatura más inmersa en este misterio, redimida desde el primer momento de su vida, y asociada de manera muy particular a la pasión y gloria de Cristo. La Asunción de María al Cielo es, pues, el misterio de la Pascua de Cristo plenamente realizada en Ella. Pero la Asunción es una realidad que nos toca también a nosotros, porque señala nuestro destino, el de la humanidad y el de la historia. En María, de hech...

Podcast, Dom. XIX del T.O. ¿Buscas este Pan?

Imagen
Estamos todavía en el evangelio de Juan, dentro del discurso de Jesús sobre el pan. Recordemos que el domingo pasado Jesús va a Cafarnaúm y la gente que ha alimentado, le sigue hasta allí. En el evangelio de hoy, para los jefes judíos de la ciudad sus palabras se vuelven problemáticas. La gente pareció abrirse al mensaje, en cambio estos dirigentes murmuran contra Jesús. ¿Cuál es el motivo? Más o menos el mismo que escandalizó a los nazarenos: ¿no es este Jesús, el hijo de José? ¿No conocemos a su padre y a su madre? ¿Cómo puede decir que descendió del cielo? La respuesta del Señor a sus murmuraciones aclara un par de cosas: La fe nace sólo dentro de una atracción de amor “nadie puede venir a mí si el Padre no lo atrae.” La chispa de la fe enciende si hay apertura y atención a lo que sucede en el corazón “quien escucha al Padre y de él ha aprendido, viene a mí”. Si uno se presenta ante Jesús blindado en su religión tranquilizadora y en sus propios patrones mentales, si no está dispuest...

Dom. XVIII del T.O. ¿Por qué buscas a Jesús?

Imagen
Este domingo continúa la lectura del capítulo sexto del Evangelio según Juan, que algunos estudiosos definen como "el discurso eucarístico". Jesús, de hecho, viene a hablar de sí mismo como pan de vida, capaz de saciar el anhelo de infinito que llevamos en el corazón. Centrémonos en particular en dos pasajes. Primero:  ¿por qué busco a Jesús? En el Evangelio la multitud persigue a Jesús y casi le reprocha haber ido a otra parte después de multiplicar los panes. Jesús revela el motivo: "En verdad, en verdad os digo que me buscáis, no porque habéis visto señales, sino porque comisteis los panes y os saciasteis" . He aquí el riesgo: buscar al Señor sólo para obtener beneficios materiales o para resolver nuestros problemas, o seguirle sólo mientras nos dé lo que le pedimos. Es cierto que muchas veces lo buscamos en nuestra hora de necesidad; de hecho, ¡es una bendición buscarlo en la hora de la aflicción! Significa que, finalmente, empezamos a comprender que no podemos ...