FIESTA DE LA EPIFANIA DEL SEÑOR - También para nosotros Dios nos da una estrella.

LA EPIFANIA DEL SEÑOR

Querida comunidad hoy es la fiesta de la Epifanía. ¿Quién sabe decirme qué significa esta palabra? Esta palabra viene del griego y significa “manifestación”. ¿Manifestación de qué?

 

Hemos leído que los reyes Magos ven una estrella. Pero ¿Quiénes son los Reyes Magos? No son ni reyes ni magos, sino que son estudiosos, probablemente astrólogos de la época de Jesús, estudiosos del cielo y de sus constelaciones. En un momento dado ven una estrella, la siguen y ésta los lleva de Jesús y en este niño reconocen a Dios hecho hombre.

 

En la época de Jesús no sólo en Israel sino también en otros territorios había la espera de algo extraordinario o mejor que Alguien extraordinario. Desde hace tiempo, estos hombres estudiosos investigaban y analizaban las estrellas porque indicaban acontecimientos importantes. Los Magos siguen a la estrella y encuentran lo que buscaban.

 

También para nosotros Dios nos da una estrella.

 

Depende de nosotros saber reconocerla.

 

La estrella para nosotros puede ser, por ejemplo, una persona que nos sugiere cómo demostrar nuestro amor a Jesús tal vez compartiendo con nuestro compañero a qui en la residencia o jugando a las cartas con el abuelo.

 

La estrella podría ser una circunstancia también en una situación negativa, por ejemplo la pandemia que nos ayudó a estar listos para ver y ayudar a los demás.

 

Los Magos, después de encontrarse con la estrella, vuelven a casa por otro camino. Nosotros también, después de conocer a nuestra estrella, ya no seremos los mismos.

 

El encuentro con nuestra estrella y por lo tanto con Jesús (la estrella, de hecho, nos lleva a Él) hace que nuestra vida sea significativa y brillante, nos lleva a ver y hacer cosas que no habíamos pensado antes, cosas que no creíamos ser capaces de hacer.

 

Las cosas que cuestan se vuelven más ligeras. El Evangelista Mateo nos dice hoy que “los Magos al ver la estrella, sintieron una alegría muy grande”. Nosotros también, al ver la estrella de la que hemos hablado, nos alegramos mucho porque sentimos directamente que “SER FELIZ SIGNIFICA HACER FELIZ”.

 

Que estos sabios de Oriente nos ayuden con su ejemplo a no dejar nunca de seguir esta estrella

 

AHORA CONCLUYAMOS REZANDO JUNTOS "Señor Jesús, haz que nuestro ojo y nuestro corazón sean como el de los Magos. Ayúdanos a reconocerte en las personas que conocemos y en los eventos que vivimos. Haznos capaces de hacernos felices para que nosotros también experimentemos Tu alegría".